Los peloteros dominicanos han dejado una huella imborrable en el béisbol de las Grandes Ligas, destacándose por su habilidad ofensiva y acumulando un impresionante total de 117 premios Bate de Plata, el galardón otorgado anualmente a los mejores bateadores en cada posición.
- Recomendamos leer: Luis Campusano se uniformará con los Tigres del Licey
Desde los primeros ganadores en 1982, Dámaso García y Pedro Guerrero, hasta los toleteros modernos, el talento dominicano ha elevado el prestigio de este premio y subrayado la importancia de República Dominicana en el deporte.
En 1982, Dámaso García, jugando en la segunda base, se destacó con un promedio de .310, sumando 185 hits, 5 jonrones, 42 carreras impulsadas y 89 carreras anotadas en 147 juegos. Ese mismo año, Pedro Guerrero, quien jugaba en los jardines, impresionó con su promedio de .304, 175 hits, 32 jonrones y 100 carreras impulsadas en 150 juegos.
Su impacto fue tan notable que ambos se convirtieron en los primeros dominicanos en ser reconocidos con el Bate de Plata, abriendo el camino para futuras generaciones.
Los jugadores dominicanos han sido constantes en su dominio en varias posiciones ofensivas. Hasta la fecha, han ganado el premio 1 vez en la posición de receptor, 8 veces en la primera base, 14 como bateadores designados, 19 como tercera base, 16 veces en la segunda base, 14 en el campocorto y 45 veces como jardineros.
Dominicanos con más Bates de Plata
Entre los dominicanos con más Bates de Plata se encuentran nombres legendarios. Encabeza la lista Álex Rodríguez, quien obtuvo 10 premios a lo largo de su carrera en diferentes posiciones del cuadro, seguido de Manny Ramírez con 9 y Vladimir Guerrero con 8.
David Ortiz, uno de los bateadores designados más célebres de todos los tiempos, ganó 7 Bates de Plata. Le siguen Albert Pujols y Sammy Sosa con 6 cada uno, ambos íconos de poder en sus respectivas épocas.
Otras estrellas dominicanas que han dejado su marca en el Bate de Plata incluyen a Juan Soto, José Ramírez, Robinson Canó y Julio Franco, quienes han ganado el premio en 5 ocasiones cada uno. Estos jugadores no solo representan el talento natural de la isla, sino también el trabajo y la dedicación que los ha llevado a la cima del béisbol mundial.
El Bate de Plata es un símbolo de excelencia ofensiva, y los dominicanos han demostrado ser grandes exponentes de esta virtud. Su presencia en Grandes Ligas sigue siendo dominante, y su legado en el Bate de Plata refuerza el lugar de República Dominicana como cuna de algunos de los mejores bateadores del mundo.