Joel Rosario logra el éxito a riendas sueltas

Joel Rosario logra el éxito a riendas sueltas

Sujetar las riendas con fuerza y soltarlas a la hora de la definición de la carrera es parte de la vida de cualquier jinete.

Sin embargo, a la hora de buscar el éxito, el dominicano Joel Rosario ha ido siempre a riendas sueltas, realizando una carrera de fondo con muchas metas alcanzadas, pero sin un final establecido.

Nacido en San Francisco de Macorís en 1985, Rosario pudo ver poco de la hípica dominicana clásica, aquella del Perla Antillana y la narración del mago que estremecía a un país cuando los caballos doblaban en la curvita de la Paraguay.

Rosario, quien el jueves recibió otro gran honor al ser declarado ganador del premio Eclipse como jockey del año en los Estados Unidos, dio sus primeros pasos en el Hipódromo Quinto Centenario y uno de sus primeros éxitos internacionales llegó en 2008, cuando condujo al legendario ejemplar Sicótico al triunfo en el Clásico del Caribe.

Para entonces, Joel ya era un jinete establecido en los Estados Unidos, luego de haber sido el dueño del Quinto Centenario, donde ganó más de 1,200 carreras, antes de dar el salto a la internacionalización.

Se inscribió en la Escuela Vocacional de Jockey cuando apenas contaba con 12 años de edad en 1997. Comenzó a montar profesionalmente en el año 2000, antes de cumplir 15 años.

Desde 2006, trabaja y reside en California y de inmediato comenzó a ganar carreras en Santa Anita, Hollywood Park y Delmar, entre otros hipódromos estadounidenses.

Para resumir, Rosario ha hecho historia al conquistar casi todas las carreras fetiches del hipismo norteamericano y algunas de las más sonadas a nivel mundial.

Es ganador del Kentuky Derby 2013, Belmont Stake 2014 y 2019, ambas patas de la Triple Corona del hipismo de los Estados Unidos. También ha vencido en ocho eventos de la Breders’ Cup, en Norfolk Stake (2008, Inglaterra) y en la archifamosa Dubai Wolrd Cup (2013).  

Desde el hipismo dominicano a los grandes escenarios mundiales, Joel Rosario ha galopado con anteojeras, solo mirando y avanzando hacia el frente.

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