Como es costumbre en las ligas profesionales de los Estados Unidos el equipo campeón visita al presidente de la nación. Ya paso con Barrack Obama que para muchos jugadores era un privilegio visitar la casa blanca pero no ha pasado lo mismo con su sucesor, Donald Trump, ya que desde que ganó las elecciones muchas estrellas de varios deportes anunciaban que si su equipo salia campeón no visitarian a Trump ni a la casa blanca.

Los actuales campeones de la NBA los Golden State Warriors y varias de sus figuras habian anunciado que no visitarían la casa blanca.

Trump se hizo de la vista gorda y apostó por el protocolo y extendió su tarjeta de entrada a Steve Kerr y compañia. Pero las reacciones dentro del equipo no se hicieron esperar algo que estallo en el Media Day.

El presidente de los Estados Unidos abandono el formalismo y le ha retirado lla invitación al equipo de los Warriors por la red social de twitter.