Tras conseguir el anillo de la NBA, el dueño de los Golden State Warriors Joe Lacob, aseguraba que este verano iba a intentar acordar extensiones de contrato con Klay Thompson y Draymond Green. El objetivo es más que claro, y es el de asegurar la continuidad del núcleo fuerte del equipo para seguir cosechando éxitos y de paso claro esta ahorrar algunos dólares.
Aunque ninguno de ellos se había pronunciado hasta el momento, el padre de Klay Thompson había descartado dicha posibilidad al asegurar que las conversaciones seguirían en el verano del 2019.
En el entorno de Draymond Green, cuando el equipo le haga la oferta de extensión de contrato este la rechazaría, ya que al igual que Thompson está en disposición de cerrar un acuerdo mucho más lucrativo si espera hasta el 2020, temporada en la que termina su actual contrato.
Si Green opta por firmar una extensión de contrato este verano podría recibir un acuerdo de tres años por 72 millones de dólares, en cambio sí espera hasta el 2020 para ser agente libre y gana algún premio de MVP de la temporada, defensivo del año o estar en uno de los mejores quintetos podría optar al máximo contrato que sería de 5 años y 226 millones de dólares.
