Mikel Landa aseguró que “va a ser difícil” que esté en el equipo español para el Mundial de Innsbruck y que en 2019 seguirá en el equipo Movistar.
Landa, quien sufrió fractura de costillas y vértebras en la Clásica de San Sebastián, lo que le impidió competir en La Vuelta, mostró sus dudas de estar en el Mundial el próximo día 30 antes de la salida del Giro de Toscana, donde realiza la primera prueba para conocer su estado físico.
“Va a ser difícil… he entrenado duro en las últimas semanas, pero tuve casi un mes sin hacer ningún esfuerzo importante”, dijo Landa a Cyclingnews.
“Hace un mes, cuando se estaba perfilando el equipo, no quería decir que no porque aún había tiempo para ver cómo me recuperaba. Ahora quiero ver cómo estoy tanto en el Giro de Toscana como en la Coppa Sabatini, y entonces lo decidiré. Todavía no estoy convencido de que pueda hacer los Mundiales. Todo dependerá de cómo me sienta en las carreras. Esa es la clave, que me dará las respuestas que estoy buscando “, señaló el ciclista alavés.
Por otra parte, y en relación a su futuro, Landa confirmó que en 2019 seguirá con el maillot azul del Movistar.
“Me quedaré con Movistar en 2019. Todavía no hemos decidido mis objetivos para el próximo año, primero tenemos que terminar esta temporada, descansar y luego vamos a empezar a pensar en 2019”, concluyó.
Landa se cayó de la Clasica San Sebastian el 4 de agosto después de terminar séptimo en la general en el Tour de Francia. El Movistar esperaba que pudiera recuperarse a tiempo para encabezar el equipo junto a Alejandro Valverde y Nairo Quintana en la Vuelta, pero no pudo participar.
El seleccionador español, Javier Minguez, incluyó a Landa en su lista inicial para Innsbruck y puso su confianza en él para decidir si puede o no acudir al Mundial.
Fuente: EFE