El Instituto Nacional de Educación Física realizó un estudio en el Distrito Escolar 15-04 sobre el desarrollo del talento físico de los niños dominicanos y los resultados fueron halagadores.
Richard Almaguer López, educador físico y especialista en ciencia del deporte, lideró este proyecto piloto con la intención de replicarlo a nivel nacional.
Es un proyecto de investigación realizado en el distrito 15-04 de Cristo Reyes, que evalúa el potencial físico y antropométrico de niños de 9 a 12 años para identificar futuros talentos olímpicos.
Al presentarse en el programa televisivo Revista Deportiva, de CDN Deportes, Almaguer López explicó los hallazgos del estudio, y aseguró que muestran un gran potencial en la población infantil dominicana, especialmente en fuerza rápida y talla, comparado con otros países.
También enfatiza la importancia de la ciencia en la identificación deportiva, la necesidad de una formación temprana sin especialización excesiva, y los planes a largo plazo para generalizar estas pruebas a nivel nacional.
¿Cómo se llevó a cabo la investigación y qué tipo de pruebas se aplicaron?
La investigación se desarrolló durante aproximadamente dos años. Inicialmente, se aplicaron cinco pruebas físicas y dos pruebas antropométricas a 3,242 niños,, de una población de 14,400.
Posteriormente, se implementó una segunda fase de instrumentos para verificar el potencial identificado. Además, se realizaron entrevistas a las madres para indagar sobre el embarazo, la calidad de vida y los hábitos de sueño y lactancia de los niños, buscando factores endógenos y del entorno que influyen en el desarrollo psicomotor y físico.
La investigación encontró que la calidad de vida de la madre durante el embarazo (no fumar, no beber, buen sueño) y la lactancia materna, junto con un buen patrón de sueño del niño en los primeros años, son cruciales para un desarrollo psicomotor óptimo.
Se observó que la mayoría de las madres no fumaban ni bebían, y más del 90% de los niños lactaron y dormían bien en sus primeros dos años. La falta de afectividad materna durante el embarazo fue la única preocupación identificada que podría afectar el desarrollo psicomotor a futuro.