Un día como hoy, Miguel Cabrera se convirtió en el primer jugador latino, y hasta el momento el único, en conseguir la Triple Corona ofensiva.
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La temporada 2012 de la MLB vio una hazaña que no se lograba desde hace mucho tiempo. La Triple Corona de Cabrera lo consolidó como el mejor bateador de todas las Grandes Ligas, quien demostró una de las campañas más dominantes al bate.
Con este logro Cabrera se convirtió en el primer jugador latino, y hasta el momento el único, en conseguir la Triple Corona ofensiva.
Así fue la hazaña de Miguel Cabrera
Miguel Cabrera evidenció desde el inicio de la temporada que todavía podía mejorar sus números en el gran diamante. Se superó en todos los sentidos en comparación con el 2011. De los 162 juegos disputó 161, lo que le permitió poder mantenerse siempre al mismo nivel. Terminó la temporada con un promedio de .344, liderando la Liga Americana, y además fue segundo en hits, con 205 (la marca más alta de su carrera). Aún más sorprendente fue que en 622 turnos al bate, solo se ponchó 98 veces.
En cuanto al poder, Cabrera tuvo mejores registros que en años anteriores. Conectó 44 jonrones en la temporada, 14 más que en el 2011. Junto con la 2013, esas fueron las dos temporadas en las que más cuadrangulares conectó el Tigre de Aragua.
Un alto número de jonrón y muchos hits conectados también le permitió ser líder en impulsadas, con 139. Estos números le ayudaron al pelotero a conseguir la Triple Corona, algo que no lo lograba nadie desde 1967. También ganó el MVP de la Liga Americana ese año.
Que es la triple corona
La Triple Corona de bateo en el béisbol se refiere a un logro que pocos peloteros han logrado en la historia de MLB. Se trata de liderar las categorías de promedio, cuadrangulares y carreras impulsadas en una sola temporada. La hazaña se hace difícil porque son pocos los beisbolistas que son capaces de mantener tanta consistencia. Hay peloteros que pueden conectar más de 30 HR e impulsar más de 100 carreras, pero el promedio poder tenerlo por debajo de .300.
El pelotero venezolano ya venía demostrando en temporadas anteriores una consistencia que pocos bateadores tenían. Era capaz de tener un promedio por encima de los .300, conectar más de 30 cuadrangulares e impulsar al menos 100 carreras. En el 2011 ya había logrado estos números, y aunque lideró la Liga Americana en promedio, los HR y RBI no fueron suficientes para lograr la Triple Corona.
