Dejando a un lado las dificultades que ha tenido en Grandes Ligas hasta ahora, Cristian Pache sigue siendo una pieza clave del futuro de los Bravos.

Su actuación del jueves por la noche demostró por qué ése es el caso.

El prospecto número 11 de Grandes Ligas conectó dos jonrones, produjo cuatro carreras y finalizó la jornada con tres hits para que Triple-A Gwinnett venciera a Memphis por 11-1.

Fue el quinto partido que disputó Pache con los Stripers, luego de pasar los meses de abril y mayo en las Mayores y en la lista de lesionados.

El coach de bateo de Gwinnett, el venezolano Carlos Méndez, considera que los problemas que tuvo Pache en las Mayores pasaron a ser algo más.

“Considero que Cristian estaba haciendo mejor trabajo con su enfoque (en las Mayores) antes de que se lesionara”, dijo Méndez. “Pero por lo que vi, no le estaba conectando a la recta. Creo que la presión comenzó a sumarse y afectó su confianza”.

Asignado a Gwinnett el 2 de junio después de salir de su segunda estancia de la lista de lesionados, el prospecto número uno de los Bravos se ha ido de 18-5 con dos remolcadas en sus primeros cuatro juegos de regreso en ligas menores.

El jueves, Pache empalmó su primer cuadrangular al bosque central-izquierdo en el tercer inning, conectó un sencillo productor al jardín izquierdo en el séptimo episodio y puntualizó su actuación con un bambinazo de dos rayas al bosque central izquierdo en el noveno inning.

Es la primera vez en su carrera profesional que Pache conecta más de un vuelacercas en un partido y la segunda vez que remolca cuatro carreras en un encuentro esta temporada.

“Cuando volvió (a Gwinnett), sabíamos que tenía que volver a darle a la recta”, dijo Méndez.

“Lo único que hicimos mecánicamente fue poner sus manos en mejor posición para atacar. Todos sus hits (el jueves) fueron contra sliders y cambios de velocidad, pero su timing con la recta fue buena. Simplemente necesita recuperar esa confianza”.

Pache, quien firmó con Atlanta como agente libre internacional en el 2015, tuvo tres campañas sólidas en ligas menores antes de despegar de verdad en el 2019.
A sus 20 años, el oriundo de Santo Domingo estableció marcas personales en casi todas las categorías ofensivas y llegó a Triple-A.

Pache participó en el Juego de las Futuras Estrellas en el 2019 y terminó dicha temporada con línea de .277/.340/.462, 57 extrabases y 61 remolcadas en 130 partidos.

Pache, quien mide seis pies y tres pulgadas y pesa 215 libres, pasó casi todo el 2020 en la sede alterna de los Bravos e hizo su debut de Grandes Ligas en agosto.

Aunque tuvo dificultades en los entrenamientos de primavera, Pache empezó la temporada del 2021 con Atlanta y fue el jardinero titular del equipo para el Día Inaugural, antes de que un tirón en la ingle lo dejara fuera de acción durante tres semanas.

El quisqueyano se ponchó 12 veces en 33 turnos al bate tras ser activado y volvió a caer en la lista de lesionados el 14 de mayo con una inflamación en la corva derecha.

“Lo que puedo decir de Cristian es que una vez que regrese a las Mayores, estará mentalmente preparado”, dijo Méndez.

“Eso no significa que se vaya a encender, pero estará listo para manejarlo. Ha habido muchos jugadores buenos que han tenido que pasar por eso antes de hallar el éxito. Cuando lo logre, le irá bien”.

Fuente: Las Mayores