LOS ÁNGELES.- La victoria de los Dodgers por 3-0 sobre los Reales el domingo fue eclipsada por la fractura en la mano izquierda que sufrió el torpedero estelar Mookie Betts.

El manager Dave Roberts dijo que Betts no necesitará de una cirugía y que la lesión no pondría fin a su temporada. Pero no hay un cronograma estimado para su regreso a la acción. El lunes, Los Ángeles colocó de manera oficial a Betts en la lista de lesionados, subiendo desde Triple-A Oklahoma City al cubano Miguel Vargas.

“Sólo va a necesitar descanso y dejar que los huesos sanen”, dijo Roberts.

Enfrentando al lanzador derecho Dan Altavilla en la parte baja del séptimo episodio el domingo, Betts fue impactado por una recta a 97.9 millas por hora en la mano izquierda y cayó inmediatamente al suelo, visiblemente adolorido. Mientras Roberts y un trainer lo examinaban, Betts permaneció en el suelo durante algún tiempo antes de poder levantarse. Fue reemplazado por el venezolano Miguel Rojas, quien finalmente ocupó el puesto de campocorto durante los dos actos restantes del juego.

“Obviamente, estaré viendo a los muchachos, animándolos”, dijo Betts, cuya mano estaba vendada después del partido. “Pero aparte de eso, es simplemente descansar, tal vez usarlo como un descanso mental. Estar listo para cuando se cure”.

El primer bate de Los Ángeles es uno de sus jugadores más consistentes de Grandes Ligas. Betts batea para .304 con OPS de .893 este año. Está empatado en tercer lugar en el equipo con 10 cuadrangulares. Con seis Guantes de Oro en el jardín derecho, se ha desempeñado de manera hábil en su primera campaña completa como torpedero.

Ya era un día difícil para los Dodgers en el frente de las lesiones, ya que antes del encuentro, inhabilitaron a los derechos Yoshinobu Yamamoto (desgarre, manguito rotador) y Michael Grove (distensión, intercostal derecha).