La selección de Australia que tuvo un gran debut ante Japón pese a la derrota demostró que su equipo depende de mucho picheo tras solamente conectar dos hits en ese partido, en su segundo encuentro se jugaba la eliminación ante China donde el que perdiera quedaría eliminado del torneo.
Australia saco la artillería pesada y tanto su ofensiva como su picheo funciono a la perfección primero para blanquear a China y segundo para derrotarlos 11 carreras a 0 y de paso eliminarles del torneo. Australia se enfrentara en un partido decisivo ante Cuba en la última fecha para saber cuál de los dos avanzara a la segunda ronda.
Luke Hughes remolco cuatro carreras y James Beresford conecto un grand slam para ser los motores ofensivos del conjunto Australiano y ayudo al equipo a solamente a jugar ocho entradas por la regla del nocaut mientras que el zurdo Travis Blackley, quien tiró en las Grandes Ligas por cinco equipos, concedió dos imparables en 4 2/3 capítulos en blanco.
Con la victoria Japón se clasifico automáticamente a la segunda ronda del torneo.
Australia nunca ha pasado a la segunda ronda en ninguno de los tres clásicos anteriores que ha disputado, incluso su record era de 1-8 con una única victoria ante México. En esta cuarta edición han dejado una grata impresión de que su beisbol está mejorando. Por su parte, Cuba ha pasado de la primera ronda en cada uno de los Clásicos Mundiales de Béisbol.
Fuente: MLB.COM
