La estrella de Los Angeles Lakers, LeBron James, ofreció su apoyo a la novata de las Indiana Fever, Caitlin Clark, después de su primera semana de baloncesto profesional.
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«Lo único que me encanta que ella trae a su deporte es que más gente quiere verlo, más gente quiere sintonizarlo», dijo James en su podcast «Mind The Game» con JJ Redick. «No lo tuerzan, no lo arruinen, Caitlin Clark es la razón por la que sucederán muchas cosas maravillosas para la WNBA».
Las Fever son uno de los dos equipos que aún no han ganado un partido de la WNBA esta temporada. Durante sus primeros cuatro juegos profesionales, Clark, la selección número uno, promedia 17 puntos con un 41,2% de tiros, junto con 5,5 asistencias y cuatro rebotes. La jugadora de 22 años está siendo protegida de manera diferente a como estaba en Iowa y ve la pelota con menos frecuencia.
«Pero para ella individualmente, no creo que deba involucrarse en nada de lo que se dice, simplemente divertirse, disfrutar», dijo James. «Pero apoyo a Caitlin porque he estado en ese asiento antes, he recorrido ese camino antes. Espero que mate, espero que a Aliyah Boston le vaya genial. Espero que les vaya genial».
James fue visto de manera similar como un prospecto generacional cuando saltó a la NBA desde la escuela secundaria y fue seleccionado como la primera selección en el Draft de la NBA de 2003 por el equipo de su ciudad natal, los Cleveland Cavaliers.
James ofreció una perspectiva similar para su hijo, el guardia de primer año de la USC, Bronny James, quien está pasando por el proceso de draft. El joven James sufrió un paro cardíaco y se sometió a un procedimiento cardíaco antes de debutar en diciembre. Promedió 4,8 puntos y 2,8 rebotes y disparó un 36% desde el campo en 25 partidos con los Trojans.
«Me pasa lo mismo al ver a mi hijo, que tiene 19 años, sentir mucha animosidad y odio hacia él cuando es sólo un niño que intenta vivir su sueño», dijo LeBron. «Hay un número muy pequeño de hombres y mujeres que realmente logran hacer realidad su sueño de jugar un deporte profesional, y aquí tenemos hombres y mujeres adultos que hacen todo lo posible para tratar de asegurarse de que eso no suceda. Es la cosa más rara del mundo».
